La historia clínica es un instrumento destinado primordialmente a garantizar una asistencia adecuada a los pacientes. Además, la información que ésta contiene resulta necesaria para otros fines que también son propias de la historia clínica como:
- Las epidemiológicas
- De salud pública y de investigación o docencia
- De inspección, evaluación, acreditación, planificación sanitaria
- Judiciales
La responsabilidad de custodiar la historia clínica recae en la dirección de los centros sanitarios, o bien en los profesionales que ejercen su actividad de manera individual.
La historia debe conservarse en condiciones que garanticen la autenticidad, integridad, confidencialidad, y la preservación y mantenimiento de la información asistencial registrada.