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El CoMB recuerda los daños asociados al consumo de cannabis y considera que la legislación sobre el consumo de esta sustancia no debería modificarse

El CoMB recuerda los daños asociados al consumo de cannabis y considera que la legislación sobre el consumo de esta sustancia no debería modificarse

A propósito del debate recurrente sobre la regulación y el consumo de cannabis, la Junta del Gobierno del Colegio de Médicos de Barcelona (CoMB) ha elaborado un Documento de Posición que tiene como objetivo recordar e insistir sobre los daños en la salud que actualmente conocemos asociados al consumo de esta sustancia. El documento La salud y el cannabis también tiene el objetivo de alertar de los daños potenciales que la creciente disponibilidad de esta sustancia puede suponer, especialmente, para las personas jóvenes.

Existen evidencias de los efectos que el cannabis y los productos derivados tienen en la salud mental y en el rendimiento cognitivo de adolescentes y jóvenes. Estos daños suponen un coste muy elevado para las personas y para nuestra sociedad. Además, pueden aumentar los riesgos de adicción y de uso indebido de otras sustancias.

El consumo de cannabis es ilegal para los adolescentes, según la legislación de todos los estados que han tomado iniciativas en este sentido. A pesar de estas precauciones, ciertos cambios en las condiciones de su uso, como, por ejemplo, la permisividad del consumo en espacios públicos, puede afectar negativamente sobre la percepción que los propios jóvenes tengan sobre los daños causados por el cannabis en lo que se refiere a minimizar sus riesgos.

El documento recuerda también que, a pesar de que ciertos derivados del cannabis han sido aprobados como medicamentos para indicaciones específicas, los efectos adversos, incluida la probabilidad de adicción, deben ser valorados siempre simultáneamente. Cualquier sustancia derivada del cannabis que quiera utilizarse para tratar problemas médicos específicos debe estar sujeta al proceso de evaluación y aprobación de las agencias reguladoras competentes.

La Junta de Gobierno del CoMB considera que la actual legislación sobre sustancias derivadas del cannabis no debería ser modificada hasta disponer de evidencias clínicas que puedan ofrecer seguridad, apoyo y garantías sanitarias suficientes a cualquier cambio que pueda tener impacto en la salud de las personas y en la salud pública.

 

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